"Los días más felices de su hijo están por venir. Dependen de usted."
Carlos González - Bésame mucho

miércoles, 23 de noviembre de 2011

La Violencia Obstétrica también es Violencia de Género

El 25 de noviembre se conmemora el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.
La Violencia Obstétrica es una forma de violencia contra la mujer y está enunciada en dos leyes nacionales y vigentes: la Nº 25.929 (de los Derechos de Padres e Hijos Durante el Proceso de Nacimiento), sancionada en 2004 y aún sin reglamentar, y en la Nº 26.485 (de Protección Integral para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra las Mujeres en los Ámbitos en que Desarrollen sus Relaciones Interpersonales).
Se trata de un tipo de violencia bastante silenciada y naturalizada, que muchísimas mujeres sufrimos tanto a nivel físico como psicológico por parte de los profesionales de la salud que deberían encargarse de protegernos a nosotras y a nuestros bebés en el momento del trabajo de parto, parto y nacimiento.
El hecho de que realicen sobre nuestro cuerpo prácticas dolorosas e innecesarias (como tactos, colocación de vías para suero, el uso de oxitocina sintética que provoca contracciones artificiales e incluso la episiotomía o corte de la vagina para evitar supuestos desgarros), que nos manipulen sin siquiera decirnos lo que nos están haciendo, que nos aten a la camilla de parto, que no nos permitan movernos con libertad, que nos infantilicen en el trato (“mami”, “mamita”, “gorda”…), son diferentes tipos de violencia que las mujeres padecemos muchas veces sin siquiera llegar a registrarlo.
Por otro lado, estas situaciones suceden en el marco de una desigualdad simbólica enorme, ya que las mujeres casi siempre llegamos a parir desinformadas, temerosas, sin poder ejercer el control sobre nuestros cuerpos y teniendo que dejar en manos de ese otro “superior”, que posee el conocimiento y el dominio de la situación, ese otro “profesional que sabe”, una de las cosas más preciadas para nosotras: la vida de nuestr@s hij@s. Esto hace que se vuelva más difícil aún discernir que estamos siendo violentadas y, en el caso de reconocerlo, que luego no podamos denunciarla.
Sin embargo se puede. El Ministerio de Salud de la Nación, a través de su línea de Información Sexual, funciona como órgano de denuncia de situaciones de violencia obstétrica. Hacé el test de violencia obstétrica y denunciá al 0-800-222-3444.

3 comentarios:

  1. Comparto totalmete con vos. Y pienso que es una violencia que se da en toda la medicina moderna!

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  2. Recien conozco tu blog, y esta entrada me pareció buenisima, lo compartí en mi facebook.
    Cuantas veces me dijeron gordi y/o mamita... que odio!
    Gracias!
    Un beso grande, Sandra.

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  3. Gracias Sandra y Gonne por los comentarios.
    Abrazos!

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